13 de julio de 2008

Cambiar al Mundo


El anciano estaba diciendo: 'De joven yo era un revolucionario y mi oración consistía en decir : 'Señor, dame fuerzas para cambiar el mundo'.
A medida que fui haciéndome adulto y caí en la cuenta que me había pasado media vida sin haber logrado cambiar a una sola alma, transformé mi oración y comencé a decir: 'Señor, dame la gracia de transformar a cuantos entran en contacto conmigo'.

Aunque solo sea a mi familia y a mis amigos. Con eso me doy por satisfecho.

Ahora, que soy anciano y que tengo los días contados, he empezado a comprender lo tonto que he sido. Hoy mi única oración es la siguiente: 'Señor dame la gracia de cambiarme a mi mismo'.

Si hubiese orado así desde el principio, no habría malgastado mi tiempo en tratar de cambiar el mundo...

Gentileza JML

No hay comentarios.:

Publicar un comentario