22 de octubre de 2010

La hora de la decisión

Un vendedor de camellos llegó a una aldea para vender bellos animales a un precio excelente. Todos compraron, salvo el señor Hoosep.

Pasado un tiempo, llegó a la aldea otro vendedor. Traía camellos excelentes, pero a un precio bastante más alto. Esta vez, Hoosep compró algunos animales.

–No compraste los camellos que eran casi gratis, ¿y ahora los adquieres por casi el doble? –le criticaron sus amigos.

–Aquellos que eran baratos a mí me resultaban muy caros, pues en aquella época tenía muy poco dinero –respondió Hoosep–. Estos pueden parecer más caros, pero para mí son baratos, ya que tengo dinero más que suficiente para comprarlos.

1 comentario:

  1. Anónimo12:58 p. m.

    Hola Mario,

    Muchas gracias por la publicacion.

    Me gustan mucho tus historias. Pequeñas, pero con gran mensaje ;)

    Saludos,

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